La estafa consiste en hacerse pasar por un empresario interesado en hacer grandes transacciones económicas y conseguir cambiar billetes falsos durante el proceso.

Las estafas a inmobiliarias a través de inversores extranjeros no son algo nuevo. Comenzaron a principio de siglo y cada vez son más habituales en el sector inmobiliario. El año pasado ya detuvieron a seis personas en Girona por estafar más de 600.000€ y, en julio de este año, la Guardia Civil detuvo a 3 personas más en Galicia. Todos ellos intentaron usar el método Rip Deal, una versión moderna de la “estampita”.

En qué consiste el “Rip Deal”

En el “Rip Deal” los estafadores buscan anuncios de ofertas inmobiliarias o de cualquier otra transacción con un alto valor económico. Cuando han dado con una posible víctima, se presentan ante los vendedores como empresarios solventes que están interesados en la compra del producto y que no tienen ningún problema en el precio.

A medida que el proceso avanza, proponen como sitio de encuentro un lugar en el extranjero, ya que por su trabajo no pueden ir a visitar el inmueble.

La estafa se produce de la siguiente forma: ellos ponen como condición que necesitan hacer un cambio de moneda. Dicen disponer de una gran cantidad de billetes de 500 euros que necesitan cambiar por billetes más bajos. Estos billetes son falsos, a excepción de una pequeña cantidad que utilizan para engañar durante la transacción.

El aumento de las estafas ha alertado a las inmobiliarias

Desde hace unos meses, con el aumento de los inversores extranjeros interesados en el sector inmobiliario en España, han aparecido empresas que intentan estafar usando el “Rip Deal”. La situación ha alertado a las inmobiliarias, ya que muchos usuarios han acudido a las oficinas para denunciar las estafas.

Este es el caso de Venta Garantizada, desde donde han visto un aumento de estas prácticas en el último año.

“Desde el verano ha habido propietarios que han venido a las oficinas para buscar asesoramiento. Les habían timado con los inmuebles de alto valor que tenían y desconocían cómo evitar esta situación. Lo que pasó es que una empresa contactó con ellos para hacerse con las propiedades de lujo. Les dijeron que eran inversores extranjeros, algo bastante habitual últimamente”, cuentan desde Venta Garantizada.

Normalmente los propietarios no tienen asesores inmobiliarios, como fue en estos casos, por lo que es más fácil caer en estas estafas. Desde Venta Garantizada inmediatamente se dieron cuenta que todo era un fraude, ya que normalmente siguen los mismos patrones: pidiendo información sobre los inmuebles y dando a cambio datos fiscales para mostrarse como una empresa fiable. Además, las llamadas puede venir tanto del extranjero como desde España.

Es entonces cuando aseguran estar interesados en adquirir el inmueble y proponen un encuentro en el extranjero.

La estafa consiste en hacer un intercambio de dinero en B

“Algunos de ellos habían llegado incluso a viajar fuera de España, ya que según la empresa estafadora no podían ir a ver el inmueble porque tenían una agenda muy apretada. Es en ese momento cuando se ve que todo es falso, sobre todo porque piden hacer un intercambio de dinero en B.”

Lo ideal en estos casos es denunciar, aunque el rastreo de los estafadores no es fácil: cambian de emails y de webs con facilidad.

Es por eso que desde Venta Garantizada advierten de esta práctica, habitual en España debido a la alta inversión extranjera. Las recomendaciones que han dado para que los usuarios no caigan en estas prácticas van sobre todo enfocadas a dejar los inmuebles en manos de profesionales y no fiarse de las altas comisiones que ofrecen a empresas o usuarios. Y por último, denunciar las estafas.

Para hacerlo se puede acudir a la Jefatura Superior de Policía Judicial de Madrid (91 582 23 47), a la Comisaría General de Policía (91 582 23 45, cgpj.udevg3@policia.es, a la Jefatura Superior de Policía Judicial de Barcelona (93 290 30 00) o al Grupo Estafas, Delincuencia Económica (93 290 33 79 ó 93 290 33 80).